Vuelta a la “normalidad”

Los que nos gobiernan nos dicen día tras día que después de que pase el confinamiento todo volverá poco a poco a la “normalidad”.

La “normalidad”, esa “normalidad” de la violencia matxista que ha maltratado y asesinado a 105 mujeres y 11 criaturas desde 2003 en Euskal Herria. La que ha producido 46 muertes en “accidente laboral” en 2019 y 22+2 en 2020.

La “normalidad” con la que se realizan recortes en sanidad reduciendo el número de camas y personal y obligándoles a trabajar sin las necesarias medidas de protección y seguridad en estos tiempos tan complicados para los hospitales y ambulatorios.

La misma que mantiene a las criaturas encerradas durante más de un mes mientras adultos y perros pueden salir a la calle.

La “normalidad” con la que se está creando un estado todavía mas autoritario, represivo y policial en nuestras calles y barrios.

La que sigue invirtiendo millones de euros en la industria militar con label y en el “esencial” TAV mientras mantiene en una situación casi de esclavitud y sin derechos a trabajadoras del hogar, de la limpieza y de las residencias.

La misma que mira hacia otro lado cuando se producen todas las muertes de migrantes en el Mediterráneo o al intentar saltar cualquier valla del mundo solo por buscar una vida mejor o huir de la violencia de su país. La “normalidad” que ignora que el coronavirus puede dejar millones de personas fallecidas en África al no disponer de la infraestructura sanitaria adecuada.

La “normalidad” que antepone el capital y las ganancias de los oligopolios a los cuidados de las personas y deja al margen al “diferente”. Los cuidados, algo que en estos tiempos de pandemia está demostrado que son lo verdaderamente importante y esencial para garantizar una vida que merezca la pena ser vivida, como siempre remarca la doctora en economía, activista social y feminista Amaia Pérez Orozco.