El sindicato LAB insiste que la brecha salarial es una “herramienta del sistema”, y advierte de la influencia que tiene en diferentes ambitos y situaciones, “quitando valor a nuestros trabajos, apropiándose gratuitamente de ellos, pagándanos menos, imponiendo jornadas parciales y contratos temporales y obligándonos a realizar los trabajos de cuidados, entre otros, sin los cuales este sistema capitalista heteropatriarcal no se sostiene ni saca beneficio”.